Bruno es el nieto de Joseph Clair, quién se enamoró de una mujer de Marsannay mientras estaba en Dijon, durante la Primera Guerra Mundial y fundó el dominio Clair-Deü.

Cuando Bruno comenzó en 1979, el famoso dominio de su familia, que lidereaba su padre, se dividió por desacuerdos y la ley de herencia dictada por Napoleón, por lo que él comenzó con una pequeña parcela de Marsannay y Fixin, en Savigny-Les-Beaune. Después en Morey-Saint-Denis comenzó a replantar vides, logrando una excelente reputación.

En 1985, familiares que tenían otras partes del terreno, le pidieron que se hiciera cargo. Es así como agregó más viñedos a su portafolio. En los 90's, Bruno dirigía ya un total de 23 hectáreas, trabajando mano a mano con su amigo y colega, Philippe Brun. Gracias a la gran mancuerna que conformaron, lograron crear un portafolio prestigioso de vinos de poca intervención, inspirados en principios orgánicos, que pronto adquirieron un gran renombre. Sin duda, imperdibles.